La UBA – Universidad de Buenos Aires – desarrolla un laboratorio biotecnológico para pymes semilleras.
Funcionará en la cátedra de Bioquímica de la Facultad de Agronomía, con un nuevo secuenciador de ADN y una plataforma de genotipado. Brindan tecnologías de punta para mejorar la competitividad de empresas nacionales.
POR: JUAN MANUEL REPETTO 28 AGOSTO, 2019
(SLT-FAUBA) La Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA) adquirió equipos de última generación para asistir a las pymes semilleras de la Argentina en sus investigaciones biotecnológicas. Con una inversión de 38 millones de pesos, se pondrán en funcionamiento un secuenciador de ADN y una plataforma de genotipado de alto rendimiento, instalados en el Laboratorio de Genómica que funciona en la cátedra de Bioquímica.
La adquisición de los equipos fue financiada por el Fondo Tecnológico Argentino (FONTAR) de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica y gestionada por UBATEC S.A., la empresa de prestación de servicios y transferencia tecnológica de la Universidad de Buenos Aires. Según Eduardo Pagano, profesor titular de la cátedra de Bioquímica de la FAUBA, el objetivo es “lograr un avance tecnológico para las pymes semilleras de la Argentina, cuyo principal valor es su germoplasma”.
Sucede que en los últimos años muchas de estas empresas debieron cerrar o fueron adquiridas por compañías extranjeras, que buscaron ampliar sus bases genéticas con material de origen nacional.
El secuenciador ya está instalado y funcionando en la cátedra de Bioquímica de la FAUBA. No sólo sirve para secuenciar genomas de especies vegetales, sino también de animales, algunos de los cuales afectan a la agricultura.
“Queremos fortalecer a los semilleros locales y hacerlos competitivos a nivel local y regional, con el desarrollo de un laboratorio de biotecnología al que puedan acceder para dar un salto tecnológico sin la necesidad de incurrir en los gastos millonarios que demanda la construcción de una plataforma propia”, dijo Pagano.
Las nuevas incorporaciones involucran un secuenciador Illumina de nueva generación (HiSeq 3000), que entre otros usos permitiría describir el genoma de especies vegetales y animales. Este equipo fue adquirido con fondos del programa de Financiamiento de proyectos de fortalecimiento de las capacidades para la prestación de Servicios Tecnológicos (FIN SET). “Es el más grande que hay actualmente en la Argentina y uno de los dos más importantes de Sudamérica”, afirmó el profesor de la FAUBA. También se adquirió una plataforma de genotipado de alto rendimiento (SNP Line), mediante el programa Fortalecimiento de la Innovación Tecnológica Aglomerados Productivos (FIT AP). Este equipamiento permitiría detectar hasta 200.000 marcadores moleculares (SNPs) por día.
Para avanzar en el proyecto FIT AP, la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires formó un consorcio junto a la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y a seis semilleros nacionales. La UNR estará a cargo de las investigaciones que se lleven a cabo con transgénesis y edición génica, en tanto la FAUBA se ocupará de estudios sobre genómica y genotipado.
“Los equipos que adquirimos ayudarán a sumar tecnologías para que las pymes nacionales puedan acceder al mejoramiento genético de sus semillas asistido por marcadores moleculares. Para eso vamos a disponer de una plataforma genómica orientada al desarrollo de marcadores moleculares y a una plataforma de genotipado que permita detectarlos”, indicó Pagano.
“Queremos fortalecer a los semilleros locales y hacerlos competitivos a nivel local y regional, con el desarrollo de un laboratorio de biotecnología al que puedan acceder para dar un salto tecnológico sin la necesidad de incurrir en los gastos millonarios que demanda la construcción de una plataforma propia”, dijo Pagano.
El secuenciador ya está instalado y funcionando en la cátedra de Bioquímica de la FAUBA. No sólo sirve para secuenciar genomas de especies vegetales, sino también de animales, algunos de los cuales afectan a la agricultura, como los insectos plaga, y sobre los cuales aún existe poca información científica. “El principal uso que le vamos a dar es para el desarrollo de marcadores moleculares, que son puntos específicos en el ADN, diferentes entre los individuos. Comparamos las secuencias de ADN de muchas variedades y, en base a esas diferencias que encontramos, podemos guiar el mejoramiento”, dijo. Además destacó que las primeras investigaciones se concentrarán en soja, sorgo, girasol, trigo y especies hortícolas.
Pagano subrayó que las seis semilleras que forman parte del consorcio constituyen sólo un punto de partida: “Si bien estas pymes tienen proyectos específicos para utilizar la plataforma, las tecnologías están disponibles para todas las empresas nacionales que quieran utilizarla”, dijo, y agregó: “No sólo vamos a brindar servicios, sino que además nuestros técnicos van a prestar asesoramiento personalizado a las empresas para generar nuevos proyectos de desarrollo y mejoramiento”.
“Además, esta plataforma, dada su envergadura y capacidad de trabajo, también estará disponible para otras áreas aplicadas, como el mejoramiento animal, y la investigación básica”, concluyó.