Un nuevo informe de S&P Global revela que los Estados Unidos todavía enfrentan desafíos para satisfacer la creciente demanda de minerales críticos necesarios para la transición energética. A pesar de la introducción de la Ley de Reducción de Inflación (IRA) el año pasado, que tenía como objetivo atraer capital privado y asegurar un suministro suficiente de minerales críticos, el análisis sugiere que satisfacer la demanda está resultando difícil.
El estudio, titulado «Ley de Reducción de Inflación: Impacto en el Mercado de Metales y Minerales de América del Norte», proyecta un aumento significativo en la demanda de tecnologías de descarbonización como vehículos eléctricos y energías renovables para 2035. Específicamente, se espera que la demanda de litio, cobalto y níquel aumente en un 15%, 14% y 13%, respectivamente, en comparación con las proyecciones anteriores a la IRA.
Una preocupación particular resaltada en el estudio es si los Estados Unidos podrán satisfacer la creciente demanda de cobre, que se pronostica que será un 12% mayor para 2035. Actualmente, el cobre no está clasificado como un mineral crítico en los Estados Unidos y no califica para los créditos fiscales de la IRA. Sin embargo, su importancia en las aplicaciones de transición energética lo hace vital para satisfacer la demanda.
S&P Global también identificó que la demanda total combinada relacionada con la transición energética de litio, níquel y cobalto será 23 veces mayor en 2035 que en 2021. Sin embargo, asegurar suficiente suministro bajo los requisitos de abastecimiento de la IRA presenta desafíos considerables. El procesamiento y la extracción de minerales críticos deben realizarse en los Estados Unidos o en países con los que los Estados Unidos tienen un acuerdo de libre comercio, sin involucrar a una «entidad extranjera preocupante».
El informe sugiere que, si bien es probable que el litio se suministre de manera suficiente a los Estados Unidos bajo los requisitos de contenido nacional de la IRA, es poco probable que el cobalto y el níquel satisfagan la demanda. Obtener suficiente suministro de níquel se espera que sea lo más desafiante, ya que no parece haber suficiente oferta en los países con acuerdos de libre comercio.
La creciente dependencia de las importaciones a medida que aumenta la demanda de transición energética también ha llevado a desafíos para los Estados Unidos, como los largos plazos de entrega y las complejidades en los permisos que pueden retrasar el desarrollo de los recursos internos. El estudio destaca la necesidad de reformas oportunas y transparentes en los permisos para garantizar un suministro constante de metales para la transición energética.
Los Estados Unidos tiene la oportunidad de abordar la demanda de cobre, ya que posee importantes recursos de cobre sin explotar. Sin embargo, acelerar la reforma de los permisos será crucial para satisfacer las necesidades de cobre del país.
Fuentes: S&P Global