El director nacional de Medio Ambiente de ese país, Jorge Rucks, dijo que «sería lamentable» tener que «enfretarse nuevamente» en La Haya
MONTEVIDEO.- El gobierno de Uruguay asegura que todos los informes técnicos surgidos del análisis del impacto ambiental de la planta de celulosa UPM -instalada en Fray Bentos- demuestran que no hay riesgo de contaminación y que los valores están muy por debajo de los parámetros exigidos.
Aún cuando las autoridades sostienen que no pueden divulgar los resultados del estudio canadiense que remite todos los meses esos reportes a los dos países, en los últimos días se han divulgado datos que surgen de esos reportes.
La agencia de noticias locales Uypress (perteneciente a un dirigente político oficialista) y el diario El País divulgaron datos que surgen de una síntesis de los 26 muestreos realizados desde junio de 2011.
Además, el director nacional de Medio Ambiente, Jorge Rucks, salió al cruce de las acusaciones de la Argentina y dijo que Uruguay debe mantener absoluta tranquilidad sobre el resultado de un nuevo juicio en la Corte Internacional de La Haya.
«Hemos dado la información, la hemos hecho pública, por lo tanto es accesible también para Argentina. Ellos tienen la información que nosotros tomamos y la pueden corroborrar. Ojalá que no vayamos [a La Haya]. Creo que sería lamentable que tuvierámos que enfrentarnos nuevamente a este tipo de pruebas internacionales entre dos países hermanos, pero no somos nosotros los que estamos tomando esa iniciativa», declaró Ruks.
Este viernes, El País informó sobre los muestreos realizados desde hace más de dos años en la denominada canaleta Parshall (que recibe efluentes de UPM) y en la desembocadura del río Gualeguaychú.
Ese informe sostiene que los valores máximos encontrados para todos los parámetros son inferiores al valor máximo permitido. «Puede afirmarse que en ningún caso las concentraciones de los efluentes de UPM superaron lo permitido por la normativa vigente», indica el reporte.
Además, del informe surge que no se detectó presencia del plaguicida endosulfán, como sostuvo el canciller argentino, Héctor Timerman.
Sobre los niveles de fósforo, se indica que están por debajo de los máximos autorizados. «Por tanto, no hay incumplimientos en los efluentes vertidos por UPM (canaleta Parshall)», enfatiza el trabajo.
En tanto, el estudio reconoce que «en una ocasión se dio un incumplimiento en los valores del parámetro pH en la descarga de una pileta de pluviales». Eso fue en noviembre de 2011.
RÍO GUALEGUAYCHÚ
Los científicos uruguayos señalan, según El País , que no hay consenso con respecto a la normativa a aplicar para analizar la desembocadura del río Gualeguaychú. Afirman que «es razonable pensar que un curso de agua de la magnitud del río Gualeguaychú puede considerarse que deba cumplir los estándares propios de un río (como el río Uruguay)».
En el caso de este curso de agua, los investigadores uruguayos mencionan incumplimientos en la concentración de nutrientes (amoníaco, fósforo), metales (mercurio, cobre, zinc, cadmio, níquel, selenio, arsénico, hierro) y fenoles.
«Asimismo, estos incumplimientos se producen con distinta frecuencia, algunos parámetros sobrepasan el estándar muy frecuentemente en los 25 muestreos analizados (amoníaco, fósforo, hierro y sustancias fenólicas) y otros en contadas ocasiones», explica el informe.
«Del análisis de los datos se puede inferir que hay una gran carga de nutrientes en este río, principalmente fósforo. El estándar para amoníaco puede ser muy restrictivo y, por consiguiente, excederse de este valor máximo puede no ser preocupante. En el río hay bastante hierro, que tampoco es preocupante. En el río Uruguay también hay altos contenidos de hierro». Otro parámetro que supera al límite en 24 de los 25 análisis es «sustancias fenólicas», especifica el estudio..