SUPLEMENTOS DIETÉTICOS. VITAMINAS. MINERALES. HIERBAS. ¿ CUÁNDO Y CÓMO?

¿Debería tomar suplementos dietéticos? Una mirada a las vitaminas, los minerales, los productos botánicos y más
Al tomar ese frasco de vitamina C o píldoras de aceite de pescado, usted se preguntará si darán resultado y si son seguros. Para empezar, lo primero que debe preguntarse es si los necesita.

Más de la mitad de todos los estadounidenses toman uno o más suplementos dietéticos a diario o ocasiones. Los suplementos se encuentran disponibles sin receta médica y por lo general vienen en forma de pastillas, polvo o líquido. Los suplementos más comunes son las vitaminas, los minerales y los productos a base de hierbas, también conocidos como productos botánicos.

La gente toma estos suplementos para asegurarse de que obtienen suficientes nutrientes esenciales y para mantener o mejorar su salud. Sin embargo, no todo el mundo debe tomar suplementos. 

«Es posible obtener todos los nutrientes que necesita al comer una variedad de alimentos saludables, en cuyo caso no hace falta tomar un suplemento», dice Carol Haggans, dietista registrada y consultora del NIH. «Pero, los suplementos pueden ser útiles para llenar los vacíos en la dieta».

Algunos suplementos pueden tener efectos secundarios, especialmente si se los toma antes de una cirugía o con otros medicamentos. También pueden causar problemas si usted padece ciertas affeciones de salud. Además, los efectos de muchos suplementos no se han probado en niños, mujeres embarazadas y otros grupos. Por lo tanto, si está pensando en tomar suplementos dietéticos, hable con su médico.

«Se recomienda que hable con su médico con respecto a qué suplementos está tomando, de manera que su atención sea integrada y bien manejada», aconseja el Dr. Craig Hopp, un experto en investigación botánica en el NIH.

Los suplementos dietéticos están regulados por la Dirección de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. (FDA, por su sigla en inglés) como alimentos, más no como medicamentos. La etiqueta puede afirmar ciertos beneficios para la salud. Sin embargo, a diferencia de los medicamentos, los suplementos no pueden afirmar que curan, tratan o previenen una enfermedad.

«Hay muy poca evidencia de que un suplemento pueda revertir el curso de una enfermedad crónica», dice Hopp. «No tome suplementos con esa expectativa».

La evidencia sugiere que algunos suplementos sí pueden mejorar la salud de diferentes maneras. Los suplementos nutricionales más populares son las multivitaminas, el calcio y las vitaminas B, C y D. El calcio mantiene la salud ósea y la vitamina D ayuda al cuerpo a absorber el calcio. Las vitaminas C y E son antioxidantes, moléculas que previenen el daño celular y ayudan a mantener la salud.

Las mujeres necesitan más hierro durante el embarazo y los bebés amamantados necesitan vitamina D. Es importante que todas las mujeres en edad fértil tomen ácido fólico (400 microgramos al día), ya sea en suplementos o alimentos fortificados.

La vitamina B12 mantiene saludables a las neuronas y las células sanguíneas. «La vitamina B12 proviene principalmente de la carne, el pescado y los productos lácteos, por lo que los vegetarianos deben considerar consumir un suplemento para estar seguros de consumir lo suficiente de esta», dice Haggans.

La investigación sugiere que el aceite de pescado puede promover la salud cardíaca. De los suplementos no derivados de vitaminas y minerales, dice Hopp, «el aceite de pescado probablemente sea el que tiene más evidencias científicas que apoyan su uso».

Los efectos sobre la salud que tienen ciertos otros suplementos comunes requieren más estudio. Entre ellos se incluye a la glucosamina (para el dolor de las articulaciones) y suplementos herbarios como la equinácea (salud inmunológica) y el aceite de linaza (para la digestión).

Muchos suplementos tienen efectos leves y pocos riesgos. Sin embargo, es necesario tener precaución. La vitamina K, por ejemplo, puede reducir la capacidad de los anticoagulantes de la sangre. El Ginkgo puede acentuar la dilución de la sangre. En ciertas ocasiones se usa la hierba de San Juan para aliviar la depresión, la ansiedad o el dolor neural, pero también puede acelerar la descomposición de muchos medicamentos como los antidepresivos y las píldoras anticonceptivas, lo cual los hace menos eficaces.

El hecho de que un suplemento se publicite como «natural» no necesariamente significa que lo sea. Las hierbas consuelda y kava, por ejemplo, pueden causar serios daños al hígado.

«Es importante conocer su composición química, cómo se las prepara y cómo funcionan en el cuerpo, especialmente en el caso de las hierbas, pero también de los nutrientes», dice Haggans. «En primer lugar, hable con su médico para que le aconseje sobre si usted necesita un suplemento y, luego, sobre la dosis y posibles interacciones con los medicamentos que usted ya esté tomando».

Con respecto a vitaminas y minerales, compruebe el valor diario porcentual (VD) para cada nutriente, para asegurarse de que no esté tomando demasiado. «Es importante considerar el VD y el límite superior», dice Haggans. Consumir demasiado de un cierto suplemento puede ser perjudicial. 

Los científicos aún tienen mucho que aprender incluso sobre las vitaminas comunes. Un estudio reciente encontró pruebas inesperadas sobre la vitamina E. Algunas investigaciones anteriores habían indicado que los hombres que tomaran suplementos de vitamina E podrían tener un menor riesgo de desarrollar cáncer de próstata. «Sin embargo, para nuestra sorpresa, un amplio ensayo clínico financiado por el NIH que incluyó a más de 29.000 hombres probó que tomar suplementos de vitamina E en realidad aumentó, en lugar de reducir, el riesgo de padecer esta enfermedad», dice el Dr. Paul M. Coates, director del Departamento de Suplementos Dietéticos del NIH. Es por esto que es importante llevar a cabo estudios clínicos de los suplementos para confirmar sus efectos.

Ya que los suplementos son regulados como alimentos, y no como medicamentos, la FDA no evalúa la calidad de los suplementos ni examina sus efectos en el cuerpo. Si se determina que un producto es inseguro después de que llega al mercado, la FDA puede restringir o prohibir su uso.

Además, los fabricantes son responsables de la pureza del producto y deben enumerar con precisión la lista de ingredientes y sus cantidades. Sin embargo, no hay agencia reguladora alguna que se cerciore de que las etiquetas coincidan con el contenido de las botellas. Usted se arriesga a que haya menos, o tal vez más, ingredientes de los que indica la lista. Incluso, puede que no se mencionen no todos los ingredientes.

Algunas organizaciones independientes realizan pruebas de calidad de los suplementos y ofrecen sellos de aprobación. Esto no garantiza que el producto funcione o que sea seguro; solamente asegura que el producto fue hecho correctamente y que contiene los ingredientes enumerados.

«Los productos que se venden en todo el país por internet y en las tiendas donde usted suele comprar deberían estar bien», dice Coates. «Según la FDA, los productos suplementarios con más probabilidades de estar contaminados con ingredientes farmacéuticos son los remedios herbales publicitados para la pérdida de peso y la mejora de rendimiento sexual o deportivo».

Para que sea fácil encontrar información confiable, el NIH ofrece fichas informativas sobre los suplementos dietéticos en http://ods.od.nih.gov/factsheets/list-all/ . Además, el NIH recientemente lanzó una base de datos en línea de suplementos dietéticos, en www.dsld.nlm.nih.gov . Esta base de datos gratuita le permite buscar los ingredientes de miles de suplementos dietéticos. Incluye información de la etiqueta sobre la dosificación, las especificaciones declaradas con respecto a la salud y las precauciones.

La aplicación MyDS proporciona la información más reciente sobre suplementos y le permite hacer un seguimiento de las vitaminas, minerales, hierbas y otros productos que usted consume. Incluso puede llevar la cuenta de los suplementos que toman sus padres, su cónyuge o sus hijos.

«Decidir si tomar o no suplementos dietéticos y cuáles tomar es un asunto serio», dice Coates. «Primero, infórmese bien sobre sus posibles beneficios y riesgos. Consulte con sus proveedores de atención médica sobre los productos de interés y decidan juntos si debería tomar algo o no, lo que ser mejor para su salud en general».

 

Decisiones Inteligentes

El uso seguro de los suplementos
Mencione a todos sus proveedores de atención médica si toma suplementos dietéticos. Algunos suplementos pueden interactuar con medicamentos o afectar las condiciones médicas.
Lea las etiquetas y las instrucciones de utilización.
«Natural» no siempre significa que es seguro. 
Más de lo debido podría ser perjudicial. No tome más de lo recomendado.

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