Pachuca, Hidalgo, México.- Agentes de la Coordinación de Investigación de Hidalgo resolvieron el caso del robo del camión con material radioactivo cobalto 60, al capturar a seis personas integrantes de una banda dedicada a asaltar transportistas, lo mismo que a desmantelar vehículos para revenderlos como fierro viejo.
Paralelamente, el Gobierno del Estado de Hidalgo, a través de su Secretaría de Salud, ayer también informó que los seis hombres se encuentran bajo observación médica en el Hospital General de Pachuca.
POR JORGE LUIS PEREZ – El Sol de Hidalgo – México –
Igualmente se subrayó que los habitantes de Hueypoxtla, Estado de México, e inmediaciones, donde fue tirado el material radioactivo, no tienen ningún riesgo que ponga en peligro su salud.
El jefe de la Coordinación de Investigación, David Alberto Torres Ramírez, informó que el lunes 2 del presente se inició la averiguación previa 13/1953/2012 por el delito de asalto y robo, tras ser robada la unidad Volkswagen, tipo camión-rabón, modelo 2007, color blanco y placas 726-DF8 del Servicio Público Federal, el cual transportaba material radioactivo cobalto 60.
Ello motivó una exhaustiva investigación que tuvo frutos el jueves anterior, aproximadamente a las 18 horas, al recibirse una llamada anónima al número 066 de emergencias, en la cual les reportaron que dos hombres estuvieron internados en la clínica 33 del IMSS de la ciudad de Tizayuca, porque presentaron un cuadro de mareos y vómito.
Quien llamó de manera anónima, manifestó que posiblemente tales personas estaban involucradas en el robo del camión con material radioactivo, caso que ya se había dado a conocer en los medios de comunicación, y proporcionando nombre y dirección de uno de ellos.
Torres Ramírez explicó que sus agentes, a través del protocolo de cooperación con las autoridades del Estado de México, acudieron a la calle Cerrada Centauro del Norte, sin número, colonia San Bartolo Cuautlalpan, municipio de Zumpango, Estado de México.
Se entrevistaron con Francisca Roldán Reyes, de 42 años, mamá del joven de 16 años que primero fue atendido médicamente en el Centro de Salud y luego en la clínica 33 de Tizayuca.
INVESTIGACIÓN RINDE FRUTOS
Así comenzó a rendir frutos la investigación, pues el menor de edad reveló que su patrón, Luis Ángel Torres, propietario de una recicladora de desperdicios industriales, el lunes, a las cinco de la tarde, había comprado un camión color negro con gris, cargado con un contenedor de madera.
Recordó que ese día, acompañado de Ulises Fragoso, empacaba botes de aluminio y pacas de cartón. Después, dijo, su patrón les ordenó desarmaran el camión y también el contenedor de madera.
Una vez que terminaron, añadió, encontraron en el contenedor de madera una cápsula de metal, a la cual le quitaron una tapa que estaba atornillada, no importándoles el letrero que decía: «Material radioactivo».
Asombrados, observaron que contenía un líquido azulado, el cual incluso cambiaba de colores. Casi de inmediato ambos comenzaron a sentirse mal, por lo cual Luis Ángel los canalizó con el doctor.
Con esta información, los agentes investigadores le ofrecieron a la mamá del adolescente llevarlo con un especialista. A cambio, la mujer les indicó el domicilio del patrón.
Así fue como llegaron con Luis Ángel Torres Árcega, de 25 años, con domicilio en la avenida 20 de Noviembre, número 20, colonia San Bartolo Cuautlalpan, municipio de Zumpango, Estado de México, propietario de un negocio de compraventa de desperdicio industrial.
Admitió que le compró a Miguel «N», alias «El Toro Loco», un camión color negro con gris, de modelo reciente. Le pidió 15 mil pesos y en el momento le entregó 11 mil, quedándole a deber el resto.
Coincidió en decir que les ordenó a sus empleados, a su hermano Edgar Torres Árcega y a otros cómplices que lo desmantelaran, porque al día siguiente lo enviarían a la comercializadora de fierro viejo, en Ciudad Sahagún.
Comentó que después de que destaparon la cápsula con la advertencia de material radioactivo y de trasladar a su gente al IMSS, le llamó por teléfono a Miguel «N», alias «El Toro Loco», para que se la llevara.
Así lo hizo su «socio», en una camioneta tipo Ranger, color gris o arena, y sólo sabe la fueron a tirar en el municipio de Hueypoxtla, Estado de México.
Posteriormente «El Toro Loco» se presentó en el domicilio de Luis para amenazarlo «con darle en la madre» si decía algo respecto al camión que le vendió y al material que transportaba.
ASALTANTE PRÓFUGO
El sujeto conocido como Miguel «N», alias «El Toro Loco», quien con un cómplice asaltó a un camionero, se encuentra prófugo.
DESMANTELABAN CAMIONES ROBADOS
Descubiertas sus ilícitas actividades y con miedo también a estar contaminado, les manifestó a los agentes investigadores que tenía una bodega en la colonia 20 de Noviembre, donde guardaba dos camiones que posiblemente tenían reporte de robo, los cuales había comprado por la cantidad de 10 mil pesos cada uno.
Simultáneo a su traslado al Hospital General de la ciudad de Pachuca, para ser internados y hasta el momento se encuentran recibiendo atención médica, los agentes investigadores continuaron su trabajo.
Refiere el mayor David Alberto Torres que en la carretera San Bartolo Cuautlalpan-Tizayuca, a la altura de la colonia Lázaro Cárdenas, sus agentes se percataron que circulaba un tractocamión Freightliner, placas 904-EP-9, color blanco, con plataforma color azul, y atrás remolcaba una grúa un tractocamión Kenworth, color blanco, sin placas de circulación.
La primera unidad la conducía Edgar Landa Hernández, de 38 años, con domicilio en la calle Espiga, colonia El Riego, de Aguascalientes, Aguascalientes.
Al verificar la situación legal de las mencionadas unidades en la base de datos de la Coordinación de Investigación, se conoció que el Kenworth fue hurtado mediante asalto con violencia en Puebla, el 20 de agosto pasado. En tanto, el Freightliner presentaba esmerilamiento de números de seguridad y remarcaje.
Ambos tractocamiones, se explicó, los escoltaba un Volkswagen Jetta, color vino, placas de circulación HLH-8702, el cual era conducido por Aldo Pórtela García, de 37 años, vecino de la avenida Hidalgo, colonia Olmos, en San Bartolo Cuautlalpan, municipio de Zumpango, Estado de México. Lo acompañaban Marco Antonio Hernández Molina y Óscar Bautista Árcega.
Los tres también estuvieron en el momento en que fue abierta la cápsula con material radioactivo, por ello manifestaron temor y pidieron también ser valorados médicamente.
Al Hospital General de Pachuca, se precisó, ingresaron el menor de 16 años, su patrón Luis Ángel Torres Árcega, Edgar Landa Hernández, Aldo Pórtela García, Marco Antonio Hernández Molina y Óscar Bautista Árcega, relacionados con el oficio ASIEH/CI/GC/123/2013.
LOCALIZACIÓN DE LA CÁPSULA
En el municipio de Hueypoxtla, Estado de México, se halló el cabezal radioactivo robado, el 2 del presente, en la comunidad de Tepojaco, perteneciente a Tizayuca, Hidalgo.
Manuel Núñez, representante directivo de la empresa Asesores en Radiación, en relación con los hechos, refirió que al tener a la vista y realizar la revisión correspondiente de las partes metálicas que reportan, corresponden al cabezal radioactivo propiedad de la empresa en mención, el cual provenía del Hospital IMSS de Tijuana, Baja California.
Dijo que no se encontraba la «fuente», que es en forma de cilindro, el cual contiene cobalto 60 y está recubierto de uranio, así que harían un recorrido a un kilómetro a la redonda para localizar el cilindro, pues es el que porta la radiación.
El lugar fue resguardado por elementos del Ejército Mexicano al mando del capitán Fernando Rafael Pastrana Padilla, así como elemento de Fuerzas Federales adscritos a la Dirección General de Explosivos, al mando del oficial Daniel Palomera Vázquez; el agente del Ministerio Público Federal, José René Rodríguez Acosta, y los ingenieros Jorge Anguiano Arévalo y Lidia Paredes Gutiérrez, directivos del Sistema de Seguridad Nuclear.
Se informó también que en el lugar denominado El Pino, donde fueron aseguradas las piezas, igualmente se capturó a Tomás Vargas Tirado, de 67 años; Juan Antonio Saldívar López, de 29, y Mauto Antonio Moya Vargas, de 20, quienes refirieron que al encontrarse en sus tierras de cultivo, localizaron las partes metálicas y por curiosidad en una carretilla las trasladaron hasta su domicilio.
Estas personas quedaron bajo custodia de la Policía Federal, así como del Sistema de Seguridad Nuclear.
Al lugar posteriormente arribó personal del Instituto Nacional de Investigación Nuclear, con el equipo especializado para la manipulación de los objetos en mención, así como para buscar y localizar el cilindro radioactivo.
SALUD
La Secretaría de Salud, en un comunicado de prensa, precisó que, derivado del robo del vehículo que contenía cobalto 60, se atendió a seis personas en el Hospital General de Pachuca.
Presentaron un cuadro de estabilidad, sin embargo, se dará seguimiento a su estado de salud..
Es importante resaltar que las personas que convivieron con los pacientes en observación no corren ningún riesgo en su salud, como tampoco lo corre el personal médico que los atiende, se detalló.
De igual forma, y por ser un asunto de competencia federal, la Secretaría de Salud del Estado de Hidalgo se mantiene en estrecha coordinación con instancias federales, como las secretarías de Gobernación y sus dependencias correspondientes, de Salud, el Centro Nacional de Vigilancia Epidemiológica (CENAPRECE), la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguarda, Policía Federal Preventiva y Procuraduría General de la República.
Ante esta situación, el Gobierno del Estado reiteró su compromiso de seguir al pendiente de la información que emitan las instancias federales correspondientes.
Lo anterior, se informó, en seguimiento a la instrucción que el gobernador Francisco Olvera ha girado al sector salud estatal, de cero rechazo para los pacientes que demanden atención en los nosocomios pertenecientes a esta institución