Tres científicos han hallado mecanismos de regulación del tráfico de vesículas. Puede ayudar en el futuro a curar desórdenes inmunológicos o la diabetes, han sido los estadounidenses James Rotheman y Randy W. Schekman y el alemán Thomas C. Südho.
Los investigadores James Rotheman, Randy W. Schekman y Thomas C. Südhof han sido galardonados con el Premio Nobel de Medicina 2013 por sus descubrimientos en Fisiología celular sobre los mecanismos de regulación del tráfico de vesículas.
Se trata de un «importante sistema de transporte en nuestras células» que podría permitir en el futuro curar trastornos inmunológicos y encontrar una solución a la diabetes, entre otros, según se ha anunciado en el Instituto Karolinska de Estocolmo (Suecia).
Los tres investigadores, dos estadounidenses y un alemán, han resuelto el misterio de cómo la célula organiza su sistema de transporte, según explica el Instituto Karolinska en una nota. Cada célula es una fábrica que produce y exporta moléculas. Por ejemplo, la insulina se fabrica y se libera en la sangre y las señales químicas llamadas neurotransmisores se envían de una célula nerviosa a otra.
Estas moléculas son transportadas alrededor de la célula en pequeños paquetes llamados, en biología celular, vesículas. Los tres galardonados han descubierto los principios moleculares que rigen cómo se entrega este paquete dentro y fuera de la célula, en el lugar y momento adecuado.
El sistema es fundamental para varios procesos fisiológicos en los que debe controlarse la fusión de vesículas, que va desde la señalización en el cerebro, hasta la liberación de hormonas y citoquinas inmunes.
El transporte defectuoso de vesículas se produce en distintas enfermedades que incluyen una serie de trastornos neurológicos e inmunológicos, así como en la diabetes. Sin esta organización precisa la célula podría caer en el caos.
El descubrimiento, por fases
En primer lugar, Randy Schekman (EE. UU., 1948), estudió cómo organiza la célula organiza su sistema de transporte desde los años 70. Descubrió que existen genes que codifican proteínas que son los principales reguladores del tráfico de vesículas.
Así, Schekman ha identificado tres clases de genes que controlan distintos aspectos del sistema de transporte de la célula. Ha proporcionando nuevos conocimientos sobre la ‘maquinaria’ que interviene en el transporte de vesículas en la célula.
Por su parte, James Rothman ha estudiado el transporte de vesículas en las células de mamíferos en las décadas de los 80 y 90. El científico descubrió que un complejo de proteínas permite a las vesículas fusionarse con sus membranas diana.
Las proteínas de la vesícula se unen a proteínas complementarias específicas en la membrana diana y velan por que la vesícula se fusione en la ubicación correcta y que el paquete de moléculas se entregue en el destino correcto.
Además, Thomas C. Südhof ha estudiado cómo se transmiten en el cerebro las señales de una célula nerviosa a otra y cómo controla el calcio este proceso. El investigador alemán ha identificado la maquinaria molecular que detecta los iones de calcio (Ca2 +) y desencadena la fusión de vesículas. Estas sustancias explican cómo se logra la precisión temporal y cómo las sustancias señalizadores pueden ser liberadas de las vesículas por orden.
Anteriores premiados
En 2012 el británico John B. Gurdon y el japonés Shinya Yamanaka fueron los galardonados con el Premio Nobel de Medicina por sus investigaciones en el campo de las células madre.
Los dos científicos fueron premiados por descubrir cómo se pueden «reprogramar» las células maduras para que se «conviertan en células pluripotentes», capaces de transformarse en cualquier tipo de tejido, lo que ha facilitado la comprensión científica de cómo se desarrollan las células y los organismos.
Un año antes el premio fue para tres científicos, el norteamericano Bruce Beutler, el luxemburgués Jules Hoffman y el canadiense Ralph Steinman por sus descubrimientos relativos a la activación de la inmunidad innata y sobre la célula dendrítica y su función en la inmunidad adaptativa.
El científico británico que obtuvo el Premio Nobel de Medicina en 2010 por sus investigaciones sobre la fecundación in vitro, Robert G. Edwards, falleció el pasado mes de abril a la edad de 87 años.
Los premiados con el Nobel de Medicina o Fisiología de 2013
James E. Rothman nació 1950 en Haverhill (Massachusetts, EE.UU.). Se doctoró en la Escuela de Medicina de Harvard en 1976, fue becario postdoctoral en el MIT y se trasladó en 1978 a la Universidad de Stanford en California, donde comenzó sus investigaciones sobre las vesículas de la célula. Rothman también ha trabajado en la Universidad de Princeton, en el Instituto de Cáncer Sloan-Kettering y en la Universidad de Columbia. En 2008 se unió a la Universidad de Yale (EE.UU.), donde actualmente es profesor y presidente del Departamento de Biología Celular .
Randy W. Schekman nació 1948 en St. Paul (Minnesota, EE.UU.). Estudió en la Universidad de California en Los Ángeles y en la Universidad de Stanford, donde se doctoró en 1974 bajo la dirección de Arthur Kornberg (Premio Nobel 1959 ). En 1976 Schekman unió a la Universidad de Berkely (California), donde actualmente es profesor en el Departamento de Biología Molecular y Celular. Schekman es también investigador del Instituto Médico Howard Hughes.
Thomas C. Südhof nació en 1955 en Göttingen (Alemania). Estudió en la Universidad Georg -August de Göttingen, donde se doctoró en neuroquímica 1980. Un año después se trasladó al Centro Médico de la Universidad de Texas (EE.UU.), con una beca postdoctoral con Michael Brown y Joseph Goldstein (quienes compartieron el Premio Nobel de Fisiología o Medicina en1985) . Südhof se convirtió en un investigador del Instituto Médico Howard Hughes en 1991 y fue nombrado profesor de Fisiología Molecular y Celular de la Universidad de Stanford en 2008.