Los primeros arqueos indicaban que había dejando un deuda de u$ s10M. Luego se estableció en torno a $ 70M.
La corredora de granos Sebastián Grimaldi SA y el acopio de su propiedad Leones Agropecuaria cayeron en desgracia el último viernes, cuando empleados de la empresa recibieron una comunicación informal del dueño avisando su retiro sin mayores precisiones. Según relata el periodista Mariano Galindez en Punto Biz, el aviso tomó por sorpresa al personal y al propio vicepresidente de la firma, Eduardo Nannini.
Un medio rosarino describió que el rumor se empezó a expandir el viernes entre clientes y proveedores de la firma y una veintena de productores agropecuarios intensificaron su pedido de cobro por granos ya entregados. Fue así que sobre el cierre de la jornada, ejecutivos de Cofco -el trader chino asiduo comprador de granos a Grimaldi (el otro es Cargill)- fueron a la sede de la empresa (Rioja 1512 de la ciudad de Rosario), y tras revisar números descubrieron una situación financiera extremadamente delicada.
Todos los números que trascendieron (pero no confirmados) estaban en torno a un descalce de u$ s10M, incluyendo deuda a productores que ya vendieron a fijar pero que no cobraron y créditos para la compra de insumos, como fertilizantes. Con el correr de la horas las investigaciones ajustaron la deuda en torno a $ 70M. Según los últimos datos oficiales, la firma tiene activos por $ 65M, un pasivo de $ 58M y en el último ejercicio cerrado tuvo ventas por $ 10 M y un resultado positivo de $ 2M.
Apenas conocida la información, el viernes 4 de enero, la preocupación se expandió entre importantes empresas que le habían abierto carta de garantía al corredor. Fue así que la firma Grimaldi Grassi, de las top ten del país y con más de 125 años de historia, emitió ayer una comunicación para aclarar que no tenía nada que ver. El escueto parte indicó: “Debido a la información que circula en relación al Sr. Sebastian Grimaldi, queremos informarles que el grupo Grimaldi dejó de pertenecer a las Firmas en el año 2005 y la propiedad, gestión y dirección de las Empresas, desde entonces, han estado en la familia Grassi”.
Sebastián Grimaldi es miembro de una de las familias fundadoras de la centenaria firma, pero a mediados de la década pasada se alejó y fundó su propia firma aprovechando su know how, contactos y prosapia en el mercado. Con firma repitió la fórmula que hizo crecer a Grimaldi Grassi: se convirtió en un corre-acopio, al controlar el acopio Agropecuaria Leones, en la provincia de Córdoba, para dejar de ser un intermediario (como son los corredores) y convertirse en un comprador de granos (vía el acopio) que luego vendía a las exportadoras, siendo clave la atracción de productores -ofreciendo mejores precios por sus granos que los corredores- a partir de la diferencia que hacía arbitrando posiciones de compra y venta en los mercados de futuros de granos y dólar.
Precisamente, las primeras hipótesis de quienes vieron los números sostienen que la causa de la crisis vendría por el lado de que se le descontrolaron esas incursiones por los mercados de futuro, en un año en que la mega devaluación y las altas tasas alteraron todo, y le generaron un creciente agujero financiero que le empezó a consumir todo lo que entraba hasta que ahora finalmente le estalló.