Sólo 95 países tienen sistemas de alerta temprana para notificar sobre un desastre inminente
.
27 Mayo 2022
Asuntos económicos
La cumbre sobre reducción de riesgos de desastres concluye con un llamado a mejorar esos sistemas y pide a todos los países esforzarse por tener una mayor resiliencia para disminuir el creciente número de catástrofes por eventos climáticos y de otro tipo. El titular de la ONU recomienda que los sistemas de alerta temprana cubran a todos los habitantes del planeta en un plazo de cinco años.
La cumbre de la Plataforma Global para la Reducción del Riesgo de Desastres terminó este viernes en Bali, Indonesia, con una exhortación a todos los gobiernos del mundo a adoptar y mejorar con urgencia los sistemas de alerta temprana y a invertir en la construcción de una mayor resiliencia para disminuir las cada vez más frecuentes calamidades.
La reunión, organizada por la Oficina de la ONU para la Reducción de Riesgos de Desastres (UNDRR) y el gobierno indonesio, contó con la participación de representantes de unos 184 países, organizaciones internacionales y otros actores interesados, que durante tres días evaluaron los avances para proteger a las comunidades de las amenazas climáticas y otras catástrofes.
Por el momento, sólo 95 países informaron tener sistemas de alerta temprana de riesgos múltiples que notifican a los gobiernos, las agencias y el público en general sobre un desastre inminente.
La cobertura más baja se observó en África, en los países menos desarrollados y en los pequeños Estados insulares en desarrollo.
En los últimos 20 años, las mujeres se han visto desproporcionadamente afectadas por el impacto de los desastres, como el cambio climático.
Forma de protección vital
La UNDRR ha insistido en que los sistemas de alerta temprana constituyen una forma de protección vital contra desastres como inundaciones, sequías y erupciones volcánicas.
En este tenor, el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, ha emplazado al mundo a lograr que los sistemas de alerta temprana cubran a todos los habitantes del planeta en un plazo de cinco años.
Teniendo en mente que las proyecciones apuntan a 560 desastres anuales, o 1,5 por día, para 2030, los congregados en Indonesia adoptaron al término de la cumbre la Agenda de Bali para la Resiliencia, que dice que los sistemas de alerta temprana “deben incluir a las comunidades en mayor riesgo con la capacidad institucional, financiera y humana adecuada para actuar en cuanto haya un aviso de este corte”.
Además de las alertas tempranas, la Agenda de Bali enfatiza la importancia de dar un enfoque de resiliencia a todas las inversiones y la toma de decisiones, integrando la reducción del riesgo de desastres a todos los niveles del gobierno y la sociedad.
El cónclave de la Plataforma Global puso en marcha la Revisión de mitad de periodo del Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres, que busca disminuir sustancialmente el riesgo de calamidades y pérdidas en vidas, medios de subsistencia, salud y activos económicos, físicos, sociales, culturales y ambientales de personas, empresas, comunidades y países en los próximos 15 años.
Para ello, el Marco aboga por la comprensión del riesgo de desastres, el fortalecimiento de la gobernanza y gestión de ese riesgo, la inversión para la resiliencia y la mejora de la preparación para una respuesta eficaz y una mejor reconstrucción.
ONU