La educación argentina actual: cuando ser docente es un martirio
Publicado por Paula Almaraz |
Las diversas administraciones, tanto a nivel provincial como nacional, han fallado en tomar medidas eficientes en mejorar el rendimiento del alumnado.
Los problemas educativos: sus causas
A la hora de hablar de los problemas de la educación, es necesario recalcar que la misma es fruto y reflejo de la sociedad en la que está insertada. Los alumnos llegan a las escuelas, con toda una carga de problemas propios: familias desgarradas y ausentes, violencia, abusos, y un sinfín de problemáticas. A eso hay que sumarle las influencias negativas que reciben de otras direcciones: drogas, alcohol, desórdenes alimentarios, etcétera. Los chicos son muy influenciables, y son proclives a caer en esos viciosos comportamientos, de los cuales les es muy difícil, por no decir imposible, salir.
No hay que olvidar que todo está enmarcado dentro de una sociedad sumamente hedonista, donde el sacrificio no es bien visto.
Hablando con un profesor que ha tenido experiencia tanto en colegios privados como en estatales nos da su opinión sobre la cuestión: “Vivimos en una sociedad en la que todo valor se diluye para caer en un relativismo absoluto. Se cuestiona y discute absolutamente todo, aun cuando es evidente que no existen argumentos serios para refutar las cosas. Se cuestiona la figura de autoridad, tanto docentes, preceptores y directivos. Este problema no solo proviene de los alumnos, sino que también por parte de las autoridades estatales. Gente con poca o ninguna experiencia dando clases, cuestiona los métodos empleados por los docentes en el proceso de enseñanza y aprendizaje”.
Estando la cultura del trabajo en decadencia y ya no siendo la educación un medio tan efectivo para el ascenso social, el alumno hoy en día, perdió toda aspiración a crecer en la vida, de superarse a sí mismo. Todo esto es fruto de lo ya relatado, de sus problemáticas y de las influencias nocivas que recibe.
La violencia en la escuela
La violencia manifestada por los alumnos es un tema preocupante. El docente muy a menudo es víctima de una serie de humillaciones y vejaciones que hubieran sido impensadas hace tan sólo unos años. Casos como el de una profesora a la cual se intentó quemarle el pelo ya no causan zozobra.
A pesar de que generalmente se resalte la violencia en los adolescentes, no hay que pasar por alto que en una gran cantidad de ocasiones quienes coaccionan al docente son los padres de los estudiantes.
Las consecuencias de la problemática educativa
No nos debe, entonces, llamar la atención el hecho de que, recientemente, la disciplina escolar argentina haya sido catalogada como la peor de un ranking mundial confeccionado por el Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) y en el cual participaron 65 países.
Con respecto al rendimiento de los estudiantes el desempeño es, asimismo, bastante paupérrimo. De 65, la Argentina quedó en el puesto 58.
¿Mejorará o empeorará la situación a futuro?
Preguntando al docente, del cual anteriormente se hizo referencia y que prefirió mantenerse en el anonimato, sobre cuáles eran sus perspectivas a futuro nos respondió: «La problemática educacional actual no se soluciona con medidas superficiales, sino que es necesaria una reforma profunda, que lamentablemente, no parece llegar nunca. Se podrán cambiar nombres, se podrán entregar diseños y planes nuevos, pero el problema real perdurará, y lo que es peor, y acorde con la crisis de la sociedad y de valores, se profundizará.» Ojalá que se equivoque.