¿Le van a hacer una cirugía? Sea sincero con respecto al uso de los medicamentos para la disfunción eréctil a fin de prevenir complicaciones peligrosas
Robert Preidt
Traducido del inglés: martes, 27 de junio, 2017 (HealthDay News) — Los hombres que toman medicamentos para la disfunción eréctil deben alertar al anestesista antes de una cirugía u otro procedimiento médico, afirman los expertos de los hospitales.
Los medicamentos para la disfunción eréctil, como Viagra y Cialis, contienen óxido nítrico, que abre los vasos sanguíneos y relaja los músculos. Si se combinan con la anestesia y otros medicamentos usados durante la cirugía, la presión arterial de un paciente podría bajar de forma peligrosa, indicó la Asociación Americana de Enfermeros Anestesistas (American Association of Nurse Anesthetists).
La asociación dijo que los hombres han de ser sinceros con respecto a su uso de medicamentos para la disfunción eréctil y de cualquier otro medicamento, incluyendo los de venta libre y los remedios herbales.
Los hombres deberían dejar de tomar los medicamentos para la disfunción eréctil unos pocos días antes de la cirugía, porque requieren de al menos 24 horas para desaparecer del cuerpo, indicó el grupo.
La asociación recomienda que se asegure de que su cónyuge, un familiar o un amigo sepa que usted toma un medicamento para la disfunción eréctil. Si necesita un tratamiento de emergencia, esa persona debería comunicar dicha información a los proveedores de atención de la salud.
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor
FUENTE: American Association of Nurse Anesthetists, news release, June 20, 2017
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En la sala de operaciones, anestesistas y cirujanos forman un binomio inseparable. Lo que uno hace, repercute en la acción del otro. Y viceversa. «Pero la mayoría de la gente pregunta quién lo va a operar, no quién lo va a dormir», bromea uno de los anestesistas del equipo. Es que esta especialidad de la medicina, que en Uruguay cuenta con unos 400 profesionales, suele desarrollarse sobre un manto de bajo perfil que solo se desdibuja cuando hay conflictos políticos y salariales. Allí sí, todos preguntan por ellos, ironizan.
Mediáticos o no, los anestesistas juegan un rol fundamental en toda intervención quirúrgica, por menor o corriente que sea. Su tarea consiste en inducir al paciente de una forma abrupta a un coma reversible. «Y poder manejar todo lo que pasa en el organismo durante la cirugía para que la persona se despierte sin consecuencias, estable, y de la misma forma en que se durmió», explica el anestesiólogo Neder Beyhaut, presidente de la Sociedad de Anestesiología del Uruguay (SAU) e integrante del Sindicato Anestésico Quirúrgico (SAQ).
En ese sentido, la ciencia ha ayudado. Si en el mundo los grandes avances de la ingeniería aplicada a la medicina se dieron en los años 90, en Uruguay se empezaron a aplicar a partir del 2000. Hoy, la apuesta es que el paciente esté dormido para que no recuerde y analgesiado para no sentir dolor. «El momento quirúrgico siempre es una instancia de mucho estrés, por eso se usan drogas que cuidan su inmunidad», dice el anestesista William Baptista. «Ahora sabemos exactamente cuánto le estamos dando de drogas anestésicas, midiendo su concentración en sangre y sobre todo su acción en el cerebro.
Ya no es miligramo/kilo y para todos igual, como antes. Es distinto dormir un niño de dos años, una persona de 30 o un adulto mayor», sostiene Clarisa Lauber, jefa del servicio de anestesia pediátrica del Hospital Pereira Rossell. A lo que Beyhaut agrega: «La seguridad del paciente no es solo nuestra obligación, mas bien es nuestra obsesión». El avance en ese sentido queda demostrado en la disminución de la mortalidad, que es una cada 50.000 a 100.000 operaciones. Pero eso hoy ya «no alcanza» para hacer «una buena práctica anestésica», coinciden.
DANIELA BLUTH – EL PAIS -MONTEVIDEO