Comer pescado es recomendable para una dieta saludable, pero la actividad pesquera puede tener consecuencias ambientales. Por esta razón, los peces de criadero constituyen una opción que satisface la demanda de productos de pesca, es inocua para la salud y reduce la presión sobre los ecosistemas naturales.
Preguntas y respuestas acerca de la inocuidad de los productos de pesca, especialmente del salmón.
¿Es recomendable comer pescado?
Sí, el pescado provee nutrientes esenciales y es fuente de proteínas, vitaminas, minerales y ácidos poliinsaturados. Hay dos subclases importantes de ácidos grasos: omega 3 y omega 6. Los aceites vegetales son ricos en ácidos grasos omega 6 y la mayoría de las personas, sin saberlo, incluyen suficiente cantidad en sus dietas. Por otro lado, los ácidos grasos omega 3, que se encuentran en los pescados y mariscos, están menos presentes en nuestras dietas. Los ácidos grasos omega 3 aparentemente tienen un efecto positivo en el ritmo cardíaco e incluso podrían reducir la incidencia del tipo de infarto más común. Otra área interesante de la investigación sobre los ácidos grasos omega 3 se relaciona con su función en el cerebro y en la función visual, ya que algunos estudios sugieren que pueden tener una función en la prevención de la degeneración macular, una forma común de ceguera. Hay estudios que señalan la importancia de los ácidos grasos omega 3 en el sistema inmune, y sugieren una influencia positiva sobre la artritis reumatoidea, el asma, el lupus, la enfermedad renal y el cáncer, así como la depresión.
¿Es seguro comer pescado de criadero?
Sí, es seguro y saludable. Los productores deben seguir reglas y normas de producción que también se exigen al resto de las áreas de producción de alimentos incluyendo: (1) realizar la actividad en aguas permitidas y seguras, (2) seguir los lineamientos establecidos para la alimentación de los animales en criadero, (3) realizar todos los procedimientos bajo condiciones sanitarias de higiene y (4) mantener registros. Cabe destacar que las dietas y condiciones ambientales en las que viven los peces de criadero son monitoreadas durante toda la vida del animal.
¿Existen diferencias nutricionales entre el pescado «salvaje» y el de criadero?
Puede haber diferencias nutricionales, pero éstas no tienen impactos sobre la salud del consumidor. Los factores que influyen en la composición nutricional del pescado son varios, incluyendo el tipo de especie, la estación, la dieta, el lugar, la etapa en la que se encuentra el animal en su ciclo de vida y la edad. En el pescado salvaje los niveles de nutrientes varían considerablemente aún entre peces de la misma especie. Los niveles de nutrientes en los peces de criadero, en particular en lo que refiere a la composición de ácidos grasos, puede variar según la alimentación.
¿Es preferible consumir pescado salvaje «recién pescado» o de criadero?
Se pueden consumir ambos. Si bien para la mayoría de la gente resulta seguro comer los peces pescados en el lugar donde viven, las poblaciones de riesgo, como las mujeres embarazadas, los bebés y los niños, deben tener especial cuidado con esto. Los consumidores deben consultar con el departamento de salud local para ver si hay recomendaciones relacionadas con los peces pescados en determinados mares, lagos, ríos o arroyos específicos. En particular, los países publican recomendaciones para el consumo de pescado basadas en los niveles de mercurio y bifenilos policlorados (PCB) que puede haber en los peces locales. Los pescadores y sus familias, sobre todo, deben informarse sobre estos consejos.
¿Y el salmón?
La controversia sobre los efectos del consumo de salmón en la salud gira en torno de dos ejes. El salmón de criadero
1. obtiene su color rosado con tinturas artificiales
2. está expuesto a antibióticos
Veamos cada punto en particular
1. El salmón salvaje adquiere su color rosado alimentándose de camarones, pequeños crustáceos y krill. Esta alimentación es rica en betacaroteno, el cual es un poderoso antioxidante y precursor de la vitamina A. Los carotenos, específicamente la astaxantina y la cantaxantina, son los que le dan al salmón su color característico. La dieta de los salmones de criadero está suplementada con astaxantina natural y/o sintética para brindarle al salmón de criadero su color típico. Tanto la astaxantina natural como la sintética son inocuas para la salud, están autorizadas para este uso y son absorbidas por el salmón salvaje y el de criadero exactamente de la misma manera.
2. Los productores de peces de criadero así como todas las agencias sanitarias y regulatorias del mundo, toman todas las precauciones necesarias para prevenir infecciones y la transmisión de enfermedades causadas por patógenos y parásitos. Para eso, intervienen veterinarios especialistas y otros profesionales expertos en acuicultura. En particular, los peces de criadero son vacunados para prevenir enfermedades, pero contrario a lo que se cree, prácticamente no se utilizan antibióticos y, si en algún caso fuesen necesarios, su uso está estrictamente regulado y siempre son suministrados con la supervisión de un médico veterinario.
¿Salmón de criadero o salmón de mar?
Ambos son saludables, no obstante, se debe tener en cuenta que en el mar puede haber contaminantes (ej. mercurio o un derrame de petróleo). Si un consumidor pesca por sí mismo debe verificar con la autoridad sanitaria local la seguridad en dicha área y luego conservar el pescado en hielo durante la pesca y el transporte.
En resumen
¡Sí al salmón! Continuemos consumiéndolo. Es rico en proteínas y omega-3, un ácido graso que está comprobado tiene beneficios para el corazón y las funciones cerebrales. Tanto el salmón salvaje como el de criadero constituyen opciones saludables y seguras.
Opinión de InfoAlimentos – Consejo Argentino de la Alimentación