ALIMENTOS y PROCESOS – Ainhoa Marcide — Barcelona es una de las ciudades elegidas para desarrollar el proyecto «Melissa» de la ESA, la Agencia Espacial Europea, que persigue producir comida, agua y oxígeno en las misiones tripuladas de larga duración, con suministros limitados. –
En el marco de este proyecto se han generado empresas dedicadas a purificar el agua con escaso gasto energético, mejorar el proceso de fabricación de vino y crear nuevos alimentos para astronautas.
«Melissa» es el acrónimo en inglés de Sistema de Soporte Vital Micro-Ecológico Alternativo, e investiga la manera de producir comida, agua y oxígeno en las misiones tripuladas de larga duración, con suministros limitados. El objetivo es dar soporte a la exploración tripulada del Sistema Solar, así como aportar respuestas a los acuciantes retos que se plantean también en la Tierra.
En «Melissa» trabajan científicos de numerosas disciplinas, además de implicar a una amplia comunidad de compañías, universidades y centros de investigación de todo el mundo. El proyecto ha generado ya más de 200 trabajos en revistas científicas.
Aplicaciones útiles también en La Tierra
Si bien «Melissa» está destinada a dar soporte a los astronautas en las misiones de larga duración, algunos de sus resultados se disfrutan ya en la Tierra. Es el caso de los sensores de biomasa, que están siendo aprovechados por los vinateros, así como los sistemas de purificación de agua, entre otros desarrollos.
En Barcelona se lleva a cabo la puesta a punto de una nueva instalación para demostrar que es posible producir alimentos, aire y agua mediante procesos biológicos, sin apenas residuos ni la entrada de recursos externos.
«Esta instalación de alta tecnología cumple los estándares de calidad más exigentes», asegura Christophe Lasseur, Jefe de Proyecto de la ESA. «Lo que hacemos es la esencia del desarrollo sostenible: reciclaje, recuperación del agua y ecología industrial».
El astronauta de la ESA Andreas Mogenssen volará en mayo en una misión de diez días, y se llevará aperitivos de proteínas elaborados con el alga Spirulina.
Poco después, el astronauta de la ESA Tim Peake ensayará en la Estación un bioreactor que demostrará el uso de algas en sistemas de soporte vital. Las algas tienen potencial para generar tanto aire respirable como alimentos para los astronautas.