El Akaflieg es una tradición académica de las universidades alemanas que tiene como propósito conformar un grupo de estudiantes que aprendan a construir aeronaves desde cero y por sí mismos.
El objetivo de diseñar, construir y volar planeadores y aviones de motor viene concretándose desde hace años en el viejo continente y ahora también tiene lugar en la UNCUYO ‘Universidad Nacional de Cuyo, Argentina’. Esto se debe a un proyecto que llevan a cabo la Facultad de Ciencias Aplicadas a la Industria y el Área de Desarrollo Territorial de la Secretaría de Extensión y Vinculación.
El proyecto contempla un mínimo de 300 horas por año que transcurren en el taller; la oficina de ingeniería y el campo de aviación para lograr la combinación de ingeniería, fabricación, transferencia de conocimientos teóricos, prácticos y experiencia. Además, se incluyen clases de vuelo y pruebas de prototipos construidos. Actualmente son cinco los estudiantes de la Facultad de Ciencias Aplicadas a la Industria los que están trabajando sobre el plano homologado del planeador ASK 13.
El trabajo de los estudiantes de Ingeniería Mecánica fue crear un plano y posteriormente realizar modelados 3 D, propuestas innovadoras, simulaciones, cálculos específicos. La próxima etapa es la de listar materiales, cómputo y compra de los elementos que permitan la construcción de la aeronave.
El grupo de trabajo está conformado por los estudiantes de la Facultad de Ciencias Aplicadas Franco Nicolás Accossatto, Juan Cruz Luffi, Juan Gabriel Rosa, Federico Gimenez, la estudiante de intercambio, Petronel Schoeman, la Dra. Silvia Clavijo, Secretaria de Ciencia, Técnica y Posgrado de la FCAI; el Ing. Martin Moyano, Secretario de Extensión y Vinculación de la FCA y el Ing. Ulderico Pace, Titular de la empresa Aeropac SA.
Sobre Akaflieg
Akaflieg viene de akademische fliegergruppe, que quiere decir Centro de Vuelo Universitario o «grupo de vuelo académico». La filosofía con la que nacen estos grupos hace casi 90 años era la de estudiantes que querían “construir aviones por nosotros mismos”. Bajo este precepto, los estudiantes universitarios de Alemania han realizado más de 35 proyectos – y la mayoría de ellos han volado con éxito. Incluso, en la actualidad se siguen utilizando siete de estos aviones.Este tipo de iniciativa cumple un rol central en el fortalecimiento de contactos y la cooperación con empresas aeronáuticas que suelen apoyar con la ayuda financiera y donaciones en especie, ya que se benefician de las actividades de investigación, por ejemplo, mediante el uso de los resultados de investigación.
Dentro de los “Akaflieg”, los más famosos son los de Hannover, Karlsruhe, Berlín, Daarmstadt, Stuttgart, Munich, y Braunschwieg. Todos estos tienen tal potencial que hasta diseñan y construyen sus propios veleros (aviones sin motor) con tecnología de punta.
Fuente: Secretaría de Extensión y Vinculación UNCUYO