No actuar tendrá consecuencias desastrosas para la salud humana y la sanidad animal, vegetal y ambiental
Los fármacos antimicrobianos, entre ellos los antibióticos, los antimicóticos y los antiparasitarios, se utilizan en medicina y veterinaria en todo el mundo para tratar y prevenir enfermedades tanto de las personas como de los animales. Asimismo, se administran en ocasiones a los animales destinados a la producción de alimentos para favorecer su crecimiento con buena salud. En la agricultura se emplean también plaguicidas antimicrobianos para prevenir y tratar las enfermedades vegetales.
El uso actual de fármacos antimicrobianos en los seres humanos, los animales y los vegetales está provocando un aumento preocupante de la farmacorresistencia y está dificultando el tratamiento de las infecciones.
Los microbios y patógenos causantes de enfermedades que resisten la acción de algunos medicamentos pueden transmitirse entre personas, animales y plantas y a través de los alimentos y contaminar el medio ambiente.
Además, la crisis climática puede contribuir a que aumente la resistencia a los antimicrobianos.
Los patógenos resistentes a los medicamentos causan casi 5 millones de defunciones al año- Es necesario actuar urgentemente para frenar el aumento y la propagación de la resistencia a los antimicrobianos en todos los países. Si no lo hacemos, nos acercaremos rápidamente a un punto de inflexión en el que los antimicrobianos necesarios para tratar las infecciones en el ser humano, los animales y los vegetales dejarán de ser eficaces.
El impacto en los sistemas de salud locales y mundiales, en las economías, en la seguridad alimentaria y en los sistemas alimentarios será devastador.
La excelentísima señora Mia Amor Mottley, Primera Ministra de Barbados y copresidenta del Grupo de Liderazgo Mundial, ha declarado: «Los vínculos entre la resistencia a los antimicrobianos, la sanidad ambiental y la crisis climática son cada vez más evidentes. Debemos actuar ahora para proteger el medio ambiente y a las personas de todo el mundo de los efectos nocivos de la contaminación por antimicrobianos».
Todos los países deben priorizar los conocimientos y la gestión de la contaminación por antimicrobianos en todo el mundo
Aunque se desconoce el alcance exacto de la contaminación por antimicrobianos en el mundo, la evidencia indica que podría dar lugar a incrementos significativos de la resistencia a estos fármacos. Por ejemplo, se han encontrado bacterias multirresistentes en las aguas marinas y en los sedimentos cercanos a los lugares donde se vierten desechos de la acuicultura, las industrias y los asentamientos urbanos.
Las personas de todos los países pueden ayudar a eliminar correctamente los medicamentos caducados y no utilizados.
Por su parte, los inversores pueden invertir en la investigación y el desarrollo de tecnologías costoeficaces de tratamiento de residuos que sean más ecológicas.