El almacenamiento, y particularmente el de electricidad, es la pieza que falta en el rompecabezas de las energías renovables. Si se resuelve, puede permitir una energía solar verdaderamente distribuida, así como acelerar la electrificación de la industria del transporte.
El futuro de la energía solar
Después de años de precios y demanda creciente, hay un cambio en el aire para el suministro de energía, y muchos buscan acelerar dicho cambio hacia las renovables. Si bien, existen factores a corto plazo para igualar la oferta y la demanda actuales en diversas regiones, la mayoría está de acuerdo en que a largo plazo nos trasladaremos a un sistema basado en energías renovables.
En este momento, la energía solar está jugando un pequeño papel, contribuyendo alrededor del 0.6 % de la combinación energética mundial, pero se espera que aumente a entre 5 % y 20 % para 2020. La variable clave es costo, hoy, en algunas regiones, la energía solar ya es comparable con el costo de la electricidad del gas natural. En otras, los subsidios gubernamentales se utilizan para hacerla competitiva.
Almacenamiento de energía: conceptos erróneos
La transformación exitosa del sistema energético se vincula cada vez más con el desarrollo y la ampliación de las soluciones de almacenamiento. Hay mucho optimismo de que se lograrán mejoras sustanciales en el almacenamiento de energía durante la próxima década.
Sin embargo, existen varios conceptos erróneos, en particular que, por sí solo, no transformará el sistema energético de la noche a la mañana, debido a que llevará muchos años o incluso décadas pasar de los combustibles fósiles a las energías renovables. Y es que el sistema energético existente no está diseñado para energías renovables, sino que se centra en los combustibles fósiles que simplemente retienen su energía hasta que se encienden.
Controlar cómo y cuándo se proporciona la energía está implícitamente vinculado a nuestra capacidad de almacenarla, especialmente en lugares donde la demanda de energía no está sincronizada con el suministro, ya sea de energías renovables solares, eólicas o de olas o una combinación energética más amplia
Las personas han estado esperando el advenimiento de las redes de energía inteligentes durante algún tiempo y tener una transmisión bidireccional de electricidad entre el proveedor y el consumidor es un elemento central de esto. Hoy en día, las principales opciones para el almacenamiento de energía a gran escala son el almacenamiento por bombeo y las baterías.
Avances en la tecnología de almacenamiento
Muchos grupos de investigación en todo el mundo esperan avances en la batería, veamos algunos trabajos relacionado con el tema:
24M: una empresa emergente de Massachusetts, está utilizando la nanotecnología para desarrollar una batería de iones de litio semisólida rentable.
Cambridge, Reino Unido: hay muchas expectativas de una nueva celda de litio-aire que ha superado el litio actual en la cantidad de energía almacenada por kg.
Aquion Energy: las baterías no tóxicas a base de agua salada de esta empresa están diseñadas para ofrecer un almacenamiento de alto rendimiento y evitar el costoso mantenimiento de productos químicos competitivos como el ácido de plomo.
LG Chem de Corea del Sur: se basa en su experiencia en el suministro de baterías de iones de litio para automóviles eléctricos, proporcionando baterías estacionarias residenciales, comerciales e industriales.
SolarCity: representa el instalador fotovoltaico residencial más grande de los EE. UU. Está implementando sistemas de almacenamiento basados en baterías de iones de litio suministradas por el fabricante de automóviles eléctricos Tesla, cuyo CEO y fundador, Elon Musk, también es presidente de SolarCity. La entrada del dúo en el almacenamiento de energía estacionaria es significativa.
Tesla con su proveedor japonés de baterías, Panasonic: está construyendo una fábrica de baterías de iones de litio de $ 5 mil millones en Nevada, la ‘iga Factory. Se puede usar una nueva batería Tesla, Powerwall, para almacenar la electricidad solar generada en el hogar, así como para reducir los costos de los autos eléctricos.
Conclusión – Responsabilidades
Algunos líderes de la industria solar ven que en los próximos años los consumidores ya no comprarán sistemas solares por su cuenta, sino más bien un sistema de energía completo, que consiste en generación, almacenamiento, gestión de carga y una aplicación, todo aprovechado a través de análisis de Big data en las nubes.
Cada consumidor tendrá más responsabilidad por el almacenamiento, la generación y el uso, pero lo hará de una manera que sea menos costosa que la energía pura de la empresa de servicios públicos, mientras esta tenga acceso a lo que necesita, para asegurarse de que funcione bien en la red.
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