El hongo Fusarium oxysporum f.sp. cubens o ‘mal de Panamá’, una de las enfermedades más nocivas de las plataneras, se había restringido a Australia y cinco países asiáticos productores de plátanos de la variedad Cavendish, pero ahora se ha extendido a África y Oriente Medio, informa el diario ‘The Telegraph’.
«Esta variedad de banana es la fruta más consumida y exportada del mundo. Con el 85% de todas las bananas que se producen para el consumo interno, se puede imaginar el impacto de esta enfermedad en la seguridad alimentaria y medio de subsistencia en los países en desarrollo», dijo Fazil Dusunceli, experto en enfermedades de la División de Protección Fitosanitaria de la FAO.
El ‘mal de Panamá’ es un patógeno que ataca a las raíces e invade el sistema vascular de la platanera. Esto impide su normal alimentación y ocasiona una progresiva deshidratación, que termina con la muerte de la planta. Además, las esporas de este hongo pueden contaminar el suelo durante varias décadas, imposibilitando el cultivo de plataneras.
La FAO ha estimado que implementar un plan estratégico global para contener la enfermedad costaría unos 47 millones de dólares. Sin embargo, patólogos vegetales sudafricanos señalaron que la tarea no será sencilla. «En la actualidad no existen normas vigentes, no hay prácticas fitosanitarias comunes ni sistemas de cuarentena», explicaron los expertos citados por ‘The Guardian’.